Pero más importante que eso, es saber que las islas “Orcades” (en francés), se encuentran al norte de Escocia y, por pequeñas que sean, están apareciendo en el mundo como una de las más importantes zonas de desarrollo (por no decir la única), de utilización de energía marítima.
Parece ilógico: todos hemos escuchado en alguna ocasión de este tipo de energía y, obvio, nos dijimos “claro, Chile tiene eso, así que seguro vendrá”; pero hasta hoy no ha “venido”.
En estas fechas donde el problema con el gas de Argentina es ya una realidad, donde la palabra “energía nuclear” hace temblar a cualquiera pero se hace necesaria, la energía marítima puede ser una alternativa válida que no se a puesto sobre el tapete.
Básicamente se trata de una turbina que se coloca en el mar y que funciona gracias a la fuerza de las olas: fácil. Ni tanto, imagínense a alguien intentando colocar un poste en medio del Estrecho de Magallanes, ¡ufff, se acabó lo fácil!
Ahora, ¿quién tiene alguna idea de cuanta energía puede producir una central de energía marítima?, cáiganse de poto: más que un reactor nuclear. Síganse cayendo de poto: una planta de energía nuclear siempre tiene el riesgo de que, al producirse un accidente, elimine toda vida existente a su alrededor y en un radio de kilómetros a la redonda, eso sin hablar de los desechos nucleares que, por muy bien tratados, siempre son un riesgo para la humanidad al estar activos por más de mil años.
El mayor problema de una planta de energía marítima es que, en caso de un accidente de proporciones, léase que se rompen los pilares que sujetan las turbinas, la máquina se va al fondo del mar. Eso sería todo.
Señoras y señores: ¿Cómo hacemos para que el Gobierno, las empresas que pueden construir esto y, sobre todo, las personas de nuestro queridísimo Chile hagan conciencia de que esto existe y que puede ser una alternativa válida para nuestro país? ¿Como hacemos para que alguien quiera venir a construir una de esas plantas al Sur del Mundo?
¡¡Ayuda!!, necesitamos energía y esta es una fuente de energía limpia, ayuden a comunicar, sino, nuestros hijos tendrán el problema.
Parece ilógico: todos hemos escuchado en alguna ocasión de este tipo de energía y, obvio, nos dijimos “claro, Chile tiene eso, así que seguro vendrá”; pero hasta hoy no ha “venido”.
En estas fechas donde el problema con el gas de Argentina es ya una realidad, donde la palabra “energía nuclear” hace temblar a cualquiera pero se hace necesaria, la energía marítima puede ser una alternativa válida que no se a puesto sobre el tapete.
Básicamente se trata de una turbina que se coloca en el mar y que funciona gracias a la fuerza de las olas: fácil. Ni tanto, imagínense a alguien intentando colocar un poste en medio del Estrecho de Magallanes, ¡ufff, se acabó lo fácil!
Ahora, ¿quién tiene alguna idea de cuanta energía puede producir una central de energía marítima?, cáiganse de poto: más que un reactor nuclear. Síganse cayendo de poto: una planta de energía nuclear siempre tiene el riesgo de que, al producirse un accidente, elimine toda vida existente a su alrededor y en un radio de kilómetros a la redonda, eso sin hablar de los desechos nucleares que, por muy bien tratados, siempre son un riesgo para la humanidad al estar activos por más de mil años.
El mayor problema de una planta de energía marítima es que, en caso de un accidente de proporciones, léase que se rompen los pilares que sujetan las turbinas, la máquina se va al fondo del mar. Eso sería todo.
Señoras y señores: ¿Cómo hacemos para que el Gobierno, las empresas que pueden construir esto y, sobre todo, las personas de nuestro queridísimo Chile hagan conciencia de que esto existe y que puede ser una alternativa válida para nuestro país? ¿Como hacemos para que alguien quiera venir a construir una de esas plantas al Sur del Mundo?
¡¡Ayuda!!, necesitamos energía y esta es una fuente de energía limpia, ayuden a comunicar, sino, nuestros hijos tendrán el problema.
1 comentario:
Islas Orcadas (acentuada en la o inicial) - en ingles Orkney Islands
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